Hoy, el estado de Puebla empieza a recuperar su patrimonio, su capital y la imagen que administraciones pasadas ultrajaron para beneficio personal.
Y es que el gobernador de Puebla, Alejandro Armenta, está dando clases de ética y trabajo a favor de las y los poblanos, recuperando no sólo la imagen, sino el patrimonio que se había entregado a particulares.
A tan sólo 194 días de la administración armentista, se ha dado a conocer el pago de la deuda que tenía Puebla por 10 mil millones de pesos del museo Barroco, recuperando este lugar que había sido entregado por el ex gobernador Rafael Moreno Valle, el cual hizo un contrato de asociación público-privada que generaba un pago anual de 523 millones de pesos con fecha de conclusión hasta el año 2039.
Así también hay que recordar pagó una deuda de 27 millones de pesos que impedía la participación de Puebla en las Olimpiadas 2025. Además, se pagaron 19 millones de pesos a la CONADE para asegurar la participación de Puebla en eventos deportivos, multa heredada igual por el ex gobernador Rafael Moreno Valle.
Estos proyectos, reflejan su compromiso con el desarrollo integral de Puebla y buscan mejorar la calidad de vida de sus habitantes.
Aún faltan mil 997 días de trabajo gubernamental, de los cuales aseguró Alejandro Armenta, trabajará a favor de las y los poblanos, caídas habrá, momentos de especulaciones en cada gobierno hay, sin embargo; de lo poco y mucho se estará viendo en el actuar del gobierno, una cosa hay que dejar en claro, en el tema de “Ciberseguridad”, hablaré muy poco, respeto el trabajo de mis compañeros periodistas, en lo personal ni mi afecta, ni compete, la censura es un tema del cual se ve en diferentes perspectivas, en mi caso, he sido un periodista crítico y que ha señalado los malos actuares de gobiernos pasados, sin ofensas, ni agresiones, porque para denunciar no se necesita ofender, aunque si dejo en claro algo muy importante y creo yo es el dilema de esta ley, exponer irregularidades, enriquecimiento ilícito, mal trabajo, agresiones, violaciones de ley, no es faltar a la dignidad, ni mucho menos deben sentirse ofendidos. Quien quiera paz, quien quiera no ser centro de señalamientos, solo hay una cosa por hacer, ejercer bien su trabajo encomendado a beneficio de las y los poblanos.
